Helen Margarita Arrieta


Siendo extranjero, las cosas que han pasado y pasan en Colombia, me son ajenas, me costó entender esta tragedia (MASACRE DEL SALADO). Uno, se acostumbra a ver masacres como un resultado no esperado de un suceso violento, como las bajas civiles en una guerra o el daño colateral de un atentado, resultando las muertes inocentes algo no deseado, que incluso deja su herida en los perpetradores, en los victimarios, generalmente llevados por el miedo o una escala de valores que ellos consideran o son obligados a considerar como buena. en este caso me sorprendió la aparición de un factor que desencaja: el placer. ese placer da vuelta completamente el asunto, el derramamiento ya no es un medio indeseado (ademas de innecesario, inmoral y antinatural) para cumplir un fin, es el fin en si mismo, recibir placer al matar, teniendo la misión como excusa, no es causa de un decaimiento de la moral, ni una corrupción externa en la escala de valores, llevada hacia la avaricia o el obedecer, o una ideología, por sobre la vida de los inocentes. es el acto de egoismo máximo de acabar con la vida de alguien mas, ajeno e inocente, para satisfacer los deseos propios de uno, y hacerlo publico e instituirlo como una practica normal. en definitiva, no me quiero extender mucho, el retrato es de Helen Margarita Arrieta la menor de las victimas, con seis años, No murió en la cancha como la mayoría sino que murió deshidratada mientras escapaba de los paramilitares, debido a la foto hubo algunos detalles que no alcance a descifrar como el color del cabello o los detalles de la cara. el gallo representa uno de los victimarios, llamado el gallo.

Adrián Oyarce
Argentina

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